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UNPARADIGMAN

Quizás etéreo... sin descartar lo tangible

Quizás etéreo... sin descartar lo tangible

Ando por las calles dirigiéndome a cualquier sitio buscando entre otras cosas un posible estimulo que me ayudé a dar el siguiente paso para poder avanzar. El 99’99% de los destinos que elegimos a lo largo del día son bien claros y sabemos llegar a ellos fácilmente, por el contrario existen una serie de destinos que se desconocen antes e incluso durante el periplo. Esto suele desencadenar lógicamente en eventuales perdidas de la localización de uno mismo. Pero estaréis conmigo de acuerdo que cuando uno no sabe bien lo que anda buscando difícilmente sabe donde iniciar la búsqueda..

Esta vez tenemos más o menos claro lo que andamos buscando, por lo menos hemos oído hablar de ello todos nosotros alguna vez en nuestra vida, bien en la infancia, la adolescencia o menos comúnmente en la madurez de la persona. Por suerte estuve saboreándola casi a diario durante casi tres años, pero un día de la noche a la mañana desapareció por mi ventana.

Difícilmente creo que volveré a encontrarla con la “misma” forma con la que se fue. Las últimas veces que pensé haberla encontrado estuve rondando entre notas musicales, billares, infinidad de gotas de agua y el clic de validación de mi título de transporte.

Qué forma tiene vuestra felicidad?

 

 
Estas ahí, yo lo sé te escondes de mí,
día con día te busco, ya lo sé, te perdí,
y las noches se hacen tán cortas sin ti,
y los días no son nada pues no estas aquí.

Cada noche es lo mismo desde que se fue,
prometio volver a mi, se perdío?, lo olvido?, yo que sé,
mi corazón tiene solo recuerdos de su ser,
y puedo olvidarla? por más que quiero es imposible.

Sueños púrpuras rodean mi vida, mi querer,
solo tú conoces mi álma, mi manéra de ser,
solo tu has cruzado mil mares junto a mi,
solo yo he muerto por ti.

Entre las sombras del olvido de tu corazón,
se esconde un sentimiento, es amor?
pero tu te sobrepones y no quieres mas dolor,
pues esperas encontrar en otros brazos una razón.

Aún cuando sabes que somos solo dos,
tu y yo almas gemelas sin adios,
no hay fuerza que me obligue a olvidarte,
a pesar de todo jamás he de dejarte.

1 comentario

Rakel -

¿La forma de mi felicidad?... No. Mi felicidad no tiene "forma", al menos no otra "forma" que no sea la mía propia. Hace algún tiempo la vida me enseñó que no debemos dejar en manos de otras "formas" o personas nuestra propia felicidad. Corremos un riesgo muy alto de ser defraudados y que se la lleven y cuesta recuperarla después.
Ahora lo que intento es, primero, ser feliz yo y, una vez conseguido, compartirlo con los demás, pero sin dejarla en sus manos.

Muy bueno el post! Me ha gustado!

Besotes!